¿ Qué ves ?

Estándar

¿ Qué ves ?. Si. Tranquilo. No es el test de Roschach ni nada por el estilo.
Es solo una tierna imagen que dibuja millones de sonrisas… allá por donde va. Pero, tengo que confesar, que cada vez que la admiro… se dibujan en mi de todo menos sonrisas.

Llámame paranoica si quieres. No te culpo. Puede que tanta campaña electoral haya acabado por mellar cualquier atisbo de capacidad crítica en mi, puede incluso, que en ocasiones… imagine señores de larga barba y pelo en pecho, ataviados de un llamativo » peto » que motosierra en mano se disponen a talar y a talar árboles… y hasta frondosos bosques en la realidad ( a veces ) inteligible de mi siempre imaginativo cerebro… pero, tú ¿ qué ves ?.

Porque he llegado a sospechar que existen seres ( igual de mal pensados ) que la susodicha, que piensan humildemente que la » bella estampa » tiene mucha más miga que la que aparenta, a simple vista.

Esos perricos tan salados, en impoluta fila india, casi tanto como la larga lista de parados que cada día repiten protocolo en las numerosas oficinas del INEM, de nuestro » glorioso » país… ese árbol tan vigoroso como espléndido, que evoca ligeramente a un paisaje que rebosa salud por cada poro, desde la raíz hasta la última hoja.

Te diré lo que yo veo. Sin anestesia; sin paños calientes.
Yo veo un árbol, al fondo ( difícil no verlo ) que a simple vista rebosa efectivamente, salud, belleza… incluso naturalidad.
Un árbol convertido en una especie de » barril sin fondo «, esperando que acudan a él, de una manera que muchas veces es imposible.

¿ Sabes por qué ?. Porque difícilmente de buenas a primeras, nadie iría a relacionarse con él desde un plano amistoso, cuando nadie nos ha educado en esos términos.

No te confundas. Esos perricos solo » hacen cola » porque ya no pueden recurrir a ningún otro. Porque no tienen más posibilidades.

Talar como norma nuestros derechos y libertades tiene un precio muy alto.
Un precio que no equivale a 3+2.

Nos relacionamos desde nuestras carencias… ese es el problema.

La necesidad obliga a estos adorables canes a recurrir a la única fuente que creen disponible, sin plantearse otras posibilidades.
Pero es solo una consecuencia de su grave sentimiento de indefensión… el que les lleva a renunciar a otras posibilidades distintas.

No somos tan distintos a ellos. Ya, ya sé que su mecanismo es mucho más simple que el nuestro ( mejor porque así no entienden de ambivalencias ) pero en líneas generales, funcionamos de la misma manera.

No te confundas, si desde la democracia alguien intenta reprimir tu personalidad, no es democracia.

Malvivir nunca es opción cuando se trata de democracia.
Si es un país democrático realmente, no te hará sufrir. Punto y final.

image

Publicado desde WordPress para Android

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s