Hace poco inauguramos el 2.015. Para muchos es solo un año más. Para otros, el año del cambio. Pero ¿ qué cambio ?.
No te confundas, un nuevo Gobierno no va a insuflarte la fuerza que tanto necesitas para » sentirte » un poco más feliz.
Si piensas así es mejor que te acerques a Carglass para que te revisen las lunas, porque has perdido agudeza visual.
Si piensas así… entonces es que nunca has sido feliz. Es que ni siquiera has experimentado lo que eso significa
Si piensas así… entonces eres de esa especie de » casta » que se pasa el día rumiando sus penas.
Si piensas así… entonces no habrá cambio posible, capaz de lograr que dejes de » quejarte de la vida «.
¿ Sabes por qué ?. Porque las ganas que tienes de abrazar el cambio son proporcionales a tu nivel de cobardía.
Querer no es poder. No, mientras sigas pensando que un señor de coleta y apellido religioso va a traerte el trabajo que tanto necesitas, mientras tú te limitas a » retwitear » la última imagen aérea de una manifestación, como si se tratara del fin del terrorismo o una marcha por la paz.
¿ Cómo miras ?. Porque yo solo veo un montón de gente concentrada en un mismo lugar… pidiendo dignidad y no sé cuántas cosas más.
¿ Qué dignidad ? ¿ la misma que utilizan al insertar una oferta de trabajo en el periódico, cuyo leit motiv es » abstenerse personas sin grado de discapacidad ? ¿ abstenerse titulados, diplomados, licenciados… madres, chicas fértiles, emparejadas o con idiomas ?.
Pero tú no te preocupes, sigue predicando, gritando al mundo que hemos despertado.
No te confundas, no eres Lina Morgan; ella sí ha despertado tras nueve meses de incesante lucha en un hospital. ¿ Nosotros ?. Solo seguimos soñando, a lo sumo, empezamos a despegar un ojo para quitarnos la legaña pero, eso sí, sin molestarnos en levantarnos de la cama y mirarnos frente al espejo. ¿ Sabes por qué ?. Por miedo, porque sabes que el espejo nunca miente ( porque quien se miente eres tú ).
Porque es más cómodo ver la paja en el ojo ajeno ( cuando la incapacidad es propia de quien ni siquiera se atreve a atisbar la viga en el propio ).
Porque mientras sigas pensando que tu voto es suficiente para motivar el » gran cambio «, el » proyecto a cumplir » siempre será un mal negocio.
¿ Quieres motivar un cambio real ?. Pues deja de colgar tus » selfies » como si no hubiera un mañana y acércate a la residencia de mayores más cercana en tu pueblo, tu barrio o donde quiera que estés.
Ve y mira, escucha, ni siquiera hace falta que abras la boca. Admira cual niño infante con zapatos nuevos al héroe que recorre 30 kilómetros cada mañana en busca de setas, aún cuando ni siquiera recuerda la temporada de setas ya pasó.
Acércate a la adorable señora con mayúsculas, que sonríe feliz solo por oler » carne fresca » cuando su diabetes le ha arrebatado la vista y sus dos piernas.
Abraza al héroe que se esconde en el baño porque piensa que Franco le persigue.
Cuando busques un cambio, solo piensa que las personas que consiguen grandes cosas en la vida, casi siempre tienen presente ayudar a los demás a conseguir cosas.
No importa lo mucho o poco que consigas, porque si estás motivado, le dejas la teoría a los demás, mientras tú te pones manos a la obra.
No olvides que no se puede lograr ningún cambio desde el rencor, la resignación, la rabia o el odio, ni siquiera desde la indignación… bueno si puedes, seguro fracasarás.
Cuando entiendas que la fuerza radica en el alma y no en el cerebro, quizás ese día puedas entender algo del a cerca del » cambio «.
Mientras tanto no serás diferente a esa » casta » que tanto odias, a ese político que envidias, o a ése empresario que tanto criticas.
Tú decides. ¿ Quieres un cambio real ?. Pues deja de convertirte en » casta emocional » y empieza a construir tu camino hoy, ahora, para que el día de las elecciones, ganes o pierdas, el » cambio » en tu vida… sea una realidad.
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